martes, 11 de enero de 2011



Niños de diferentes sectores de la capital exhibían los más variados juguetes y disfrutaron de ellos en las aceras y frentes de sus casas, con motivo de celebrarse el Día de los Reyes Magos, aunque la festividad no mostraba la misma vistosidad de años anteriores.
Asimismo, aunque en cantidades reducidas, los infantes ingresados en hospitales pediátricos de la capital también fueron sorprendidos con juguetes que eran llevados a los centros de salud por instituciones y personas particulares.
Los infantes con enfermedades genéticas de la piel participaron en una celebración especial que les organizó el Departamento de Dermatología Pediátrica del Instituto Dermatológico y Cirugía de Piel.
En sectores populosos, aunque muchos niños mostraban con alegría sus juguetes, otros se quedaron a la espera de que Santa Claus y los Reyes Magos llegaran con sus regalos, como es el caso de Agustín, del sector de Villas Agrícolas, a quien su madre le dijo que le compraría sus reyes después. Muchos padres dejaron la compra de los juguetes a los niños para entregarlos el día 10, fecha para la cual fue movido el feriado.
A Junior le regalaron una motocicleta “four wheel” infantil. A Brando, su tía le compró una escopeta y a Luis le compraron un carro a control remoto.
En partes más populosas del sector Villas Agrícolas fue muy notoria la cantidad de niños que exhibían pistolas, escopetas, ametralladoras, fusiles y otros juguetes que incitan a la violencia. En Gualey las niñas disfrutaban de muñecas y pelotas.
María Cristina, madre de una niña de cinco años, le compró juego de cocina y muñeca, ya que “para ellos siempre algo aparece”.
Mientras unos se divierten con lo poco o mucho que recibieron muchos niños tendran que mantener sus esperanzas y confiar que el proximo año les ira mejor.